Vivir sin sentir sería un sinsentido.

Vivir sin sentir sería un sinsentido.
The flower that blooms last is the most rare and beautiful of all.

Thursday 18 February 2016

F.

Yo creo en los ángeles.

No vuelan, las alas no son su principal locomotora. Pero hacen volar (que, al fin y al cabo, es tanto o más bello). Su amor centellea, palpita. Es tangible y sedoso como el terciopelo. Nos envuelve entre sollozos y nos atavía de besos. Y es que los ángeles desconocen nuestro nombre, mas, ¡qué les importa un entramado de letras sin sentido! Los ángeles hacen de cinco minutos de ausencia la promesa de un recibimiento tan vehemente como enternecedor. Las hebras de su afecto hilvanan nuestra indumentaria oscura y, silenciosamente, conforman nuestro más estimado trofeo. Su lealtad es plena y hercúlea, pero nos hace sentir livianos y redimidos. 

Los ángeles no hablan nuestro idioma, ni falta que les hace. Todo lo transmiten en una mirada cómplice, en una caricia, en un lamento o un mero brinco que incita al juego. Porque los ángeles juegan; su vida es un suculento recreo, un pasatiempo, una aventura. Y sueñan con tenernos de compañeros, de confidentes, de protectores. No reparan, pobres serafines, en que somos nosotros quienes les debemos nuestro afecto infinito, una dulzura apacible y ardiente, un cruce de emociones encontradas que nos acercan a la tierra y nos alejan del bullicio. 

Se marcharán, los ángeles. Y dejarán tras ellos un rastro de arena desgranada bajo la marea de nuestros ojos. Pues con ellos fuimos amigos, hermanos, padres y maestros. A cambio obtuvimos la más hermosa de las enseñanzas, una lección incorpórea y eterna que con el tiempo cicatrizará y adoptará la esencia de los luceros. Vuelas con ellos, ángel mío. Mi querido, mi compañero, mi confidente, mi protector. Esta locura que me atrapa rezuma una enfermedad incurable, pues ya nunca volveré a mecerte entre mis brazos. Y soy consciente de que mi dolor es caduco y tu recuerdo perenne. Hoy vives en mí y soy yo la estrella que desprende tus candiles. No dejaré que te apagues, amigo. La luz de mi amor será tan eterna como nuestro lazo.

Yo creo en los ángeles. Y esta noche habrá uno más en el cielo.

Addah Monoceros.
27-12-12
Homenaje a mi perro y mejor amigo Flip, fallecido el día anterior.

Wednesday 17 February 2016

Rose.

And it is when eve sheds her nuances on our fortune that our very last match flares up. Somehow like throwing ourselves into an obscure crevasse. Fated but, yet again, expected. It is as though everything amongst us scrambled their way through our scars and into their freedom. It fucking hurts, of course, but the twinges are soothing. They trace a template so beautiful no naked eye can take in such witchery. Life is haunting, it sure is. I guess maturity comes from upholding our scarlet cruor and using it as oil for our rouge mischances. Growing, they say, is letting perceptions dance until their feet wear out. Until our lashes bloom in blazing petals and our lips imbibe their chains. Maybe there is a certain art to dying our heartbeats slam their impending tempo to. Maybe they harbour the anthem to our last breath, as it chants its farewell lyrics once we leave.

Addah Monoceros.

Eco.

Fuiste la vil apariencia 
De una verdad burda y fría,
Empozoñando recuerdos
De afanosa virulencia.

Pues mi silencio fue ambiguo,
Cual exquisita hoja en blanco,
Hoja en la cual tú trazaste
Mi plañido hueco, exiguo.

¡Qué habrían dado mis ojos
por perderse en el abrazo
de ese porvenir funesto
bajo el cual hoy me acongojo!

Mas la infancia muere joven,
Me remacha con sus púas,
Y mi adiós entristecido,
Vaga descompuesto y cojo.

Mis risueñas rosaledas 
Se desangran en mis mares,
Mares argentinos, canos,
Pues de dicha nada queda.  

¡Maldita tu tiranía!
Usurpaste mi puericia, 
Y ahora me arropa tu noche,
Mas jamás se hará de día. 

Addah Monoceros.
©2003.

Hades.

You were my one and only.

Tyranny upon assent.
Bewitching a shapeless soothing reign of terror.

Little did I need to stammer in grief.
To lurk in your heed.
To ask.
To drink.
To see for myself.
To take swigs of finis. 

You ducked in my eos.
You burnt out my soul into gasps of incense. 
Flaring.
Withering in a pyre of ecstasy. 
Crumbling soot and wonder. 
A fervid reawakening, an ardent pandemonium. 

In brumes you became beautiful.
A wraith I grasped in longing.
Come back!
You exist but under sunlight. 

Infinity in motion.

Silent silver.
Dozing sunrise.

My tyrant. 

My one.
My only.

Addah Monoceros.

Hades.

You were my one and only.

Tyranny upon assent.
Bewitching a shapeless soothing reign of terror.

Little did I need to stammer in grief.
To lurk in your heed.
To ask.
To drink.
To see for myself.
To take swigs of finis. 

You ducked in my eos.
You burnt out my soul into gasps of incense. 
Flaring.
Withering in a pyre of ecstasy. 
Crumbling soot and wonder. 
A fervid reawakening, an ardent pandemonium. 

In brumes you became beautiful.
A wraith I grasped in longing.
Come back!
You exist but under sunlight. 

Infinity in motion.
Silent silver.
Dozing sunrise.

My tyrant. 
My one.
My only.

Addah Monoceros.

Tuesday 9 February 2016

Nachtwache.

Leben. Überraschung, Geschenk, Traum. 
Ich schulde Leben so viel, dass mein Herz standhaft von Druck schlägt. Dank denen, ihr durch gegangen seid, und auch denen ihr hier geblieben seid, weil alle ein bisschen mich gezeigt habt. Fast als Stücke der Juwele in einer unsterblichen Bildhauerkunst...

Zweifellos, es gibt keinen Blinde, der nicht sehen will. Das habe ich seit ich ein Mädchen war gehört. Und ich habe natürlich dieses Spiel schön gespielt, bis meine arme Füße zu müde zu laufen gewesen. 

Danke für der Umarmung. 
Für die Hilfswörtern und die Liebe. 
Für die Gelegenheit ein volles Leben zu genießen, wo ich so viel gelernt habe. So viel. So wie ich. So wie Kinder. 

Leben. Überraschung, Geschenk, Traum.
Es ist die Essenz des unveränderlichen Todes. Das Sterben ist ziemlich süß, wenn wir es im Augen schauen. Sterben ist Leben. Leben ist Dankbarkeit. Bitte, liebe Sterben, wundervolles Leben, lassen sie uns glänzen. Lassen sie uns unsere eigene Skulptur schaffen.
Lassen sie uns blühen. 

Addah Monoceros.